Investigadores de la Universidad de Northeasten situada en Boston,
Estados Unidos, han fabricado un brazo robótico que se controla con los
ojos, permitiendo así que personas con discapacidad puedan alimentarse
por sí mismas. Este brazo robótico ha sido denominado como iCRAFT.
Tiene potencia, según explicaban los investigadores “para dar a miles
de personas algún tipo de discapacidad, la independencia a comer con una
ayuda mínima de un cuidador”.
Esta creación se trata de un proyecto final de curso,
el cual está dirigido por Mohamed Kante y cinco compañeros más de su
clase de ingeniería eléctrica en la universidad. Este grupo, ha
conseguido devolver cierta “independencia” a aquellos pacientes que sufren algún tipo de discapacidad física.
Existen también otros aparatos electrónicos, como por ejemplo
BrainGate que permite a los pacientes controlar un brazo robótico con la
mente, no obstante, esta tecnología requiere también una parte de
cirugía o implantación en la